Periodista
sin querer, conduce hace 8 años, “Coffee Break” el magazine matutino de Radio
Jai, que mezcla todo tipo de contenidos, desde música en hebreo hasta la
actividad dentro de la Legislatura. Vivió en distintos lugares del mundo y hoy
sigue trabajando para crecer junto a la única radio judía de Latinoamérica.
Por Nicolás Ini y Ezequiel Abraldes
¿Cómo
ingresaste al mundo de la radio?
Yo vengo de otro lugar, lo más cercano a la
comunicación que puede representarme es el video, filmando, editando. Yo hacía
ese trabajo.
Y una vez filmando para un cumpleaños infantil, cuando era algo novedoso en el año 1993, al poner un cd de música judía, uno de los animadores se me acerca y me cuenta que le habían propuesto hacer un programa con música israelí en la nueva Radio Jai.
El era locutor y quería entrar en la carrera de alguna forma, me propuso hacer un demo. Por suerte les gustó, por lo que empezamos el programa, el como conductor y yo como productor.
Esto sucedió en Octubre. Luego en el verano le ofrecieron un trabajo en la costa y a partir del 94 me ofrecen quedarme con el programa. Ahí empiezo a estar en el aire.
Y una vez filmando para un cumpleaños infantil, cuando era algo novedoso en el año 1993, al poner un cd de música judía, uno de los animadores se me acerca y me cuenta que le habían propuesto hacer un programa con música israelí en la nueva Radio Jai.
El era locutor y quería entrar en la carrera de alguna forma, me propuso hacer un demo. Por suerte les gustó, por lo que empezamos el programa, el como conductor y yo como productor.
Esto sucedió en Octubre. Luego en el verano le ofrecieron un trabajo en la costa y a partir del 94 me ofrecen quedarme con el programa. Ahí empiezo a estar en el aire.
¿Fue
un programa exitoso?
El programa se llamaba Escala 96.3, lo
hacíamos de 20 a 22 y tuvo una buena repercusión.
Pero como había quedado solo, desde la radio me propusieron sumarme a un magazine que ya tenían a la tarde donde había un locutor y un productor. Se llamaba “Te con kijalaj” que vendría a ser “Té con masitas” y duró varios años. Como la radio recién arrancaba y yo tenía mucho conocimiento de la música israelí, me ofrecieron la musicalización de la radio y continué también con la conducción. Cuando me quise dar cuenta, pasaron 20 años.
Pero como había quedado solo, desde la radio me propusieron sumarme a un magazine que ya tenían a la tarde donde había un locutor y un productor. Se llamaba “Te con kijalaj” que vendría a ser “Té con masitas” y duró varios años. Como la radio recién arrancaba y yo tenía mucho conocimiento de la música israelí, me ofrecieron la musicalización de la radio y continué también con la conducción. Cuando me quise dar cuenta, pasaron 20 años.
¿Cómo
es, para una persona judía, trabajar en una radio para la comunidad judía?
En realidad no somos una radio “para
judíos”, ni siquiera todos los que trabajan acá son judíos. La idea de la radio
judía creo que es aun más interesante cuando uno la piensa para un “no judío”.
Porque la existencia de los prejuicios, más todavía con el antisemitismo, se
debe al desconocimiento, el miedo a “lo que me dijeron que hacen cuando yo no
los veo” genera esos prejuicios y me parece que la radio judía despeja todas
esas dudas, te cuenta de manera abierta cuáles son nuestras festividades, por
qué las hacemos, de qué se habla esta semana en la sinagoga en la Torá, que es
nuestro libro sagrado, que pasa en el medio oriente.
Si bien aquel que es judío tendrá un interés particular, tenemos una audiencia no judía muy grande a quienes les interesan los temas, o quizás solo les gusta la música.
Si bien aquel que es judío tendrá un interés particular, tenemos una audiencia no judía muy grande a quienes les interesan los temas, o quizás solo les gusta la música.
¿Pero
el contenido es totalmente orientado al judaísmo?
No, tenemos de todo. Hacemos radio y
hablamos de lo que pasa en el país, obviamente. Es probable que le demos
similar magnitud a algún hecho que haya sucedido acá a 2 cuadras como a otro
que tuvo lugar en Tel Aviv.
Lo que sí, hablamos íntegramente en español. Hay mucha gente que le presta atención a la radio, hasta evangélicos; que seguramente saben del Antiguo Testamento más que yo.
Es una radio judía. No por judíos ni para judíos, sino para contarle las noticias o pasar música israelí a todo el mundo.
Lo que sí, hablamos íntegramente en español. Hay mucha gente que le presta atención a la radio, hasta evangélicos; que seguramente saben del Antiguo Testamento más que yo.
Es una radio judía. No por judíos ni para judíos, sino para contarle las noticias o pasar música israelí a todo el mundo.
¿Tienen
muchos oyentes fuera del país?
Por supuesto. Gracias a las nuevas
tecnologías, mucha gente de todas partes del mundo la escucha por internet. Nos
pasa todos los días que al comenzar damos la temperatura y la hora y los
oyentes en la otra punta del planeta nos dice “acá hace 30 grados y son las
12”.
Tanto yo como muchos otros que entramos a los medios hace mucho tiempo, no estábamos acostumbrados a esto y tuvimos que entenderlo.
Tanto yo como muchos otros que entramos a los medios hace mucho tiempo, no estábamos acostumbrados a esto y tuvimos que entenderlo.
¿Haber
vivido en Israel te permitió contactarte mejor con el oyente?
No se si mejor, pero fue de gran ayuda más
que nada por el idioma, porque yo puedo entrar a un sitio de noticias en hebreo
y al entenderlo, se lo cuento a la gente mucho mejor que lo que un traductor puede hacerlo. Hablamos mucho del Estado de Israel también, acá se cuenta lo
que sucede en general en medio oriente y parece que están siempre en guerra,
pero nosotros contamos las problemáticas sociales de todos los días de Israel. Y entender lo que se comunica en hebreo, me ayuda mucho. El haber estado ahí
me ayudó a entender la idiosincrasia del medio oriente, que
no es la misma que la occidental.
¿Cómo
ves el futuro de tu programa, de tu persona y de la radio?
La verdad es que, de ninguno te puedo hablar. Estoy acostumbrado a este país; aquí cada uno de los planes
que se hacen, no siempre prosperan como uno lo imaginó, lo cual por
un lado me disgusta y por el otro es apasionante.
Así como estaba filmando un cumpleaños y terminé produciendo y conduciendo en radio, está bueno que las cosas te sorprendan. Uno a veces comete quizás el error de estar cómodo en la inercia de cada día y su rutina, por eso cada tanto está bueno sacudir. Yo hoy volví a meterme en la parte del video después de mucho tiempo, haciendo documentales y filmando en festivales.
Así como estaba filmando un cumpleaños y terminé produciendo y conduciendo en radio, está bueno que las cosas te sorprendan. Uno a veces comete quizás el error de estar cómodo en la inercia de cada día y su rutina, por eso cada tanto está bueno sacudir. Yo hoy volví a meterme en la parte del video después de mucho tiempo, haciendo documentales y filmando en festivales.
¿Creés
que puede ser de ayuda para la radio?
Si, sin dudas. Hoy la radio por internet es
un producto audiovisual, entonces podés trabajar con programas que también
tengan imagen, podés publicar esos mismos documentales en la página y que la
gente los comente en tu programa de radio.
El periodismo te va dando esa oportunidad de escribir, hablar, editar filmaciones. Todo esto supeditado a las nuevas tecnologías, porque el periodismo va a seguir siendo uno, pero aun no sabemos lo que vamos a poder hacer el día de mañana.
El periodismo te va dando esa oportunidad de escribir, hablar, editar filmaciones. Todo esto supeditado a las nuevas tecnologías, porque el periodismo va a seguir siendo uno, pero aun no sabemos lo que vamos a poder hacer el día de mañana.
Yo nunca soñé tener todas las herramientas para que, una persona desde Estados
Unidos me pida que pase una canción, y en cuestión de segundos ese tema salga
al aire.
No sé el futuro que nos depara, en principio la tecnología ha demostrado que puede ir borrando algunos roles humanos, pero no todos.
No sé el futuro que nos depara, en principio la tecnología ha demostrado que puede ir borrando algunos roles humanos, pero no todos.
0 comentarios :
Publicar un comentario